Séptimo Grado, Segunda Orden "Adepto Liberado":
"Un apunte sobre lo que es la Gnósis"
-¿Gnósis o gnósis?-
Gnósis significa "Conocimiento" y se trata de una palabra peculiar en tanto que sirve como singular y como plural; es decir, se puede de Gnósis respecto de un conocimiento concreto o se puede decir las gnósis si nos estamos refiriendo a diferentes parcelas del Conocimiento.
Los no versados en esto de la Gnósis creen que está palabra representa un concepto unívoco e inequívoco; pero esto no es así, dado de gnósis, como diversos conocimientos, existieron antes del Cristianismo, durante el Cristianismo y mucho después del Cristianismo.
Por ejemplo, hoy día ¿quien no ha oído hablar de la Gnósis Samaeliana o de la Gnósis Hiperbórea? En su sentido estricto, se puede hablar de gnósis, en tanto que son conocimiento; independientemente de que sean reales o ficticios, verdaderos o falsos.
Tanto la Gnósis de Samael Aún Weor como la Gnósis Hiperbórea de Nimrod del Rosario (Luis Felipe Moyano), son creaciones recientes, independientemente de que sus creadores hayan intentado pasarlas como Conocimiento Antiguo y Ancestral. También se puede hablar de una Gnósis Quántica que está estructurada en torno a los últimos avances científicos y tecnológicos; pero cuando aquí, en éste Lugar, hablamos de Gnósis, no nos estamos refiriendo a estas parcelas de "neo conocimiento"
Respecto a las gnósis anteriores y contemporáneas del Cristianismo, podemos decir algo parecido. En ningún caso de puede hablar de una sola Gnósis como no se puede hablar de una sola Escuela de Kárate. Se puede decir que han existido tantas gnósis como maestros gnósticos. Es cierto que unos pocos conceptos, como el de la Trinidad divina y humana así como de la naturaleza humana del cuerpo de Jesús son consustanciales a todas las gnósis de los primeros siglos del Cristianismo; pero,a parte de eso, sus experiencias gnósticas e iniciáticas eran muy diferentes entre unas y otras.
Por ejemplo, existían grupos gnósticos que, dado que los cuerpos eran la prisión para los espíritus, propiciaban el celibato con el fin de impedir el que nuevas almas fuesen atrapadas en la rueda infernal de la Vida; pero, al mismo tiempo, había grupos, también gnósticos, que predicaban a favor de una suerte de anarquía sexual promiscua, pues dado que ya vivían el el infierno, lo propio sería sacarle, al cuerpo temporal, el mayor beneficio posible a ni el de placer; pero haciendo lo posible para que ese hecho no trajese, como consecuencia, nuevos nacimientos. Solo son un par de ejemplos, cuyos nombres, pueden los buscadores encontrar en Internet a poco que se lo propongan.
Por lo tanto, no es propio hablar de una sola Gnósis; de hecho, el propio Cristianismo primitivo, procedente de Saulo de Tarso, el Apóstol Pablo, posee unas potentes connotaciones gnósticas, en el sentido de la Palabra que aquí estamos tratando. En ese sentido, no se puede unificar el término Gnósis para englobar a todas las gnósis de los primeros siglos del Cristianismo, dado que existían muchas formas de interpretar el Cristianismo, aunque todas posean en común un tinte helénico, pitagórico y neoplatónico.
La mente abierta de los estudiantes rosacruces, dicho todo lo anterior, conociendo esta particularidad de los término Gnósis y gnósis, no puede caer en el error de considerar que las gnósis representan o representaban una única doctrina, con un único catecismo y con la misma colección de libros sagrados.
Cada Organización eclesiástica, de carácter gnóstico, elegía aquellos escritos más en consonancia con sus creencias y rechazaba aquellos otros que no fomentaban sus particulares argumentos.
Lamentablemente, hasta nuestros días, solo ha llegado una Religión basada en su colección bibliográfica, la Iglesia Católica y que, desde sus comienzos, fue disgregándose, primero, muy tempranamente, en la Iglesia Ortodoxa y después en un maremagnun de iglesias y denominaciones protestantes.
Quizá el gusto por el disfrute de la sexualidad, de forma libre y sin tabúes, no sea compartido por algunas versiones de la Gnósis; pero eso no quita para que esas organizaciones no dejen de ser consideradas como netamente, gnósticas. No obstante, una de las características generales de todos los gnósticos, era su libertad de pensamiento y su repugnancia por el fanatismo y la irracionalidad, considerando que lo racional e irracional son algo relativo y dependiente de la consciencia y evolución intelectual de cada época.
Aralba Pensator Minister, Frater R+C
