miércoles, 27 de octubre de 2021

Lección 43, Séptimo Grado, Segunda Orden

 Séptimo Grado, Segunda Orden "Adepto Liberado":

"La dualidad Discípulo/Maestro"


Dentro de la Rosacruz, allá donde haya un Maestro también hay un Discípulo. No tiene sentido la maestría sin el discipulado.


En los manifiestos fundacionales de la Rosacruz, se específica que sus miembros, los hermanos, debían de dispersarse, en solitario por todo el Globo para predicar la verdadera Luz del Evangelio; pero también se indica que cada uno de los miembros de la Fraternidad debía de acoger, en su seno, a un Discípulo que pudiese retransmitir la Buena Nueva en caso de fallecer el Maestro.


Por lo tanto, no es baladí el discernir que los hermanos rosacruces siempre se han manifestado de dos en dos, Discípulo y Maestro.


Digamos que el binomio Discípulo/Maestro produce una realimentación, ahora dirían feedback, que provoca que tanto el Maestro como el Discípulo, semejante a una cinta de Moebius, intercambien sus roles; es decir, ciertamente, el Discípulo aprende de su Maestro; pero no es menos cierto, que el Maestro también aprende en compañía de sus Discípulo y, en estos casos, el Discípulo se convierte en Maestro y el Maestro en Discípulo.


Ciertamente, el binomio Discípulo/Maestro es una Unidad inseparable y necesaria para mantener viva la Fuerza del Evangelio, transmitido por los rosacruces, a través de las edades.


Un supuesto Maestro sin un Discípulo no puede ser considerado como Maestro así como un supuesto Discípulo sin un Maestro tampoco podría ser considerado un Discípulo.


La Gnósis; es decir, la Verdad, se ha venido transmitiendo, de este modo, por generaciones.


Los creadores de las organizaciones rosicrucianas, legítimas, siempre han sido discípulos avanzados, tras de los cuales siempre ha habido un Maestro Invisible. Tengan esto muy en cuenta.


Ningún Maestro Rosacruz, salvo su fundador Christian Rosentkreutz, jamás ha estado detrás de cualquiera de las entidades rosicrucianas que, publicitándose, han salido, en algún instante, a la Luz.


Solo existe una Fraternidad Rosacruz legítima y, esto debe de quedar bien claro, no es visible, ni posee una sede oficial en algún lugar determinado y, por supuesto, es secreta e indetectable para los investigadores profanos.


En algún instante se ha podido detectar a algún Discípulo de la Rosacruz; pero raramente a su Maestro, el cual es uno de los verdaderos hermanos de la Rosacruz Invisible.


Christian Rosentkreutz es un Título no un Personaje y que da nombre, en cada momento, al Maestro último de la Fraternidad y, el cual, rige su Destino en nuestro Plano Material.


Por lo tanto, no es que Christian Rosentkreutz sea un Individuo, aquí, eterno e inmortal sino que su maestría se transmite, como un Título, de generación en generación al más anciano de todos los hermanos rosacruces.


Del mismo modo que la Hermandad se constituyó con ocho miembros, incluido el Maestro Fundador, Christian Rosentkreutz, así hoy en día siguen existiendo sólo ocho hermanos mayores, incluido el Maestro de Maestros y que es el único que se mantiene en un lugar estático pero móvil y que todos conocemos como el Colegio Invisible de la Rosacruz. 


Los hermanos de la Rosacruz están obligados a procurarse de un Discípulo, uno solo, al que depositar el Conocimiento Gnóstico de la Rosacruz. El Trono del Colegio jamás puede permanecer vacío y es por ello que el Maestro de Maestros también tiene a su lado, al Hermano de mayor rango y edad con el fin de que los sustituya llegado el caso. En este caso, dicho Maestro acompañante, digamos, Discípulo de Christián Rosentkreutz, dejó a su Discípulo, ya preparado, para que ocupe su lugar como Maestro Rosacruz y, por lo tanto, Hermano Mayor de la Fraternidad. Un Hermano que, como es lógico y dicta la Norma, deberá de procurarse a un Discípulo.


Por lo tanto, vemos que a pesar de que el Colegio de la Rosacruz está constituido por ocho hermanos; de los cuales siete son itinerantes y repartidos por todo el Mundo; en realidad, el número de miembros, entre maestros y discípulos, puede alcanzar el número de dieciséis; pero jamás superar esa mágica cifra cuya reducción da siete.


No, aunque la Rosacruz se originó en Alemania; esto no quiere decir que ahora, en este instante, su sede se encuentre allí, sino que, como hemos dicho, va cambiando de región y de País, de forma periódica,con el fin de que jamás pueda identificada su ubicación.


Las escuelas, órdenes y supuestas fraternidades de la Rosacruz no son la verdadera Fraternidad Rosacruz sino meros portales de acceso al Colegio Invisible de la Rosacruz. En realidad, dichas organizaciones o entidades funcionan a modo de cantera donde los siete maestros itinerantes de la Rosacruz pueden cooptar a su único Discípulo; de todos sus miembros el más apto y preparado, por lo tanto, tengan en cuenta que, muchos son los llamados pero muy pocos los elegidos.


Aralba Pensator Minister, Frater R+C