jueves, 28 de octubre de 2021

Lección 45, Séptimo Grado, Segunda Orden

 Séptimo Grado, Segunda Orden "Adepto Liberado":

"La manía de intentar amoldarlo todo a nuestra personal manera de pensar"


Una Rosacruz para todos los gustos


Alguien, en alguna ocasión nos dijo que la Rosacruz procedía de Egipto porque era un enamorado de la egiptología.


Otros, en ocasiones, nos comentan que la Rosacruz y la Masonería poseen un mismo origen y que son complementarias.


Muchos son los que creen que la Rosacruz poco o nada tiene que ver con el Cristianismo y sí con el Judaísmo Jasiditas y la Cábala.


Algunos creen firmemente que la Rosacruz es de origen islamista y que está emparentada con el sufismo chihita.


Los más extravagantes hunden las raíces de la Rosacruz en las tradiciones del oriente profundo como en el hinduismo, del Budismo o del Taoísmo.


La Rosacruz no deja de ser un concepto moderno creado en el siglo XVII, aunque algunos alucinados, más que iluminados, pretendan remontarlo al siglo anterior o aépocas pretéritas.


La Rosacruz hereda del Islam, quizá por su influencia en los habitantes cristianos de Jerusalén, durante la épocas de los cruzados, el concepto de no representar la figura Humana. De hecho, tras la parcial Reforma Protestante, los reformados se niegan a plasmar la figura de un hombre crucificado. A los sumo, conservan la Cruz como recuerdo del sacrificio supremo por la redención de la Humanidad. Los rosacruces, que no dejan de ser más que una parte de los reformistas insatisfechos, incluyen la Rosa junto a la Cruz y eso, ¿a qué se debe?


El Mesías de Israel, en la Profecía del Antiguo Testamento, es denominado como la Rosa de Sharon o el Lirio de los valles; etimología que el catolicismo asume como un título de María, la Madre de Jesús. No, la Rosacruz simboliza la rosa roja crucificada en el madero de tortura romana, la Cruz. La sangre derramada de Cristo para la remisión de los pecados.


El Rosacrucismos, a pesar de que algunos quieran convencernos de lo contrario, no tiene que ver ni con el Judaísmo ni con el Islam. En uno de los manifiestos de los rosacruces se nombra tanto al Papa como a Mahoma de anticristos y servidores de Satán.


De hecho, a pesar de que la primera intención de Christian Rosentkreutz era visitar Tierra Santa, resulta que tras la muerte de su tutor, se desvía hacia Oriente; es decir, no visita Jerusalén y dado que los manifiestos son libros de una gran simbología, se nos está advirtiendo de que la Rosacruz nada tiene que ver con el Judaísmo o sus tradiciones. Ya, ya sé, me consta que algunas escuelas rosicrucianas incluyen al Pueblo Judío como parte de la cadena iniciàtica y a los personajes ahistóricos de David y Salomón como pertenecientes a la Gran Fraternidad Blanca. Puras conjeturas basadas en la mera imaginación.


Se habla del Rosacrucismo como si se tratara de un movimiento místico al igual que el sufismo islàmico; pero no existe constatación de ese hecho en los tres manifiestos fundacionales de la Rosacruz; de hecho, se trata de un Movimiento Evangelizador, dado que su simbólico fundador, Christian Rosentkreutz, manda a los siete hermanos de la Rosacruz a predicar por todo el Mundo, la Buena Nueva del Cristianismo, la Gnósis.


Es cierto que Christian Rosentkreutz, en su viaje iniciàtico, visita países que se encontraban bajo el yugo islámico; pero no es menos cierto que las personas con las que contacta no son precisamente seguidores de Mahoma; por lo tanto, estamos hablando de ideas anteriores a la ocupación árabe de aquellos territorios. Herejías, si se quiere, o sectas sincréticas que conservaban mucho de la Tradición Gnóstica neoplatónica.


Cuando llega el futuro fundador de la Rosacruz a Toledo, Ciudad donde convivían pacíficamente las tres religiones monoteístas, el Judaísmo, el Cristianismo Católico y el Islam (recordemos que la Reforma, en aquella época, no tocó el suelo Peninsular), cuando llega, decimos, no es escuchado ni comprendido por los más grandes eruditos de su época y, decepcionado, retorna a Alemania, su ciudad natal, donde funda la Fraternidad de la Rosacruz.


La Rosacruz, pese a quien le pese, es de origen cristiano reformista. La Rosacruz, los rosacruces mejor dicho, entendieron que la Reforma del Cristianismo no solo era una Reforma incompleta sino coja y manca porque se basaba sobre unos determinados libros y no otros, la Biblia Católica y sobre una tradición religiosa mancillada por la manipulación Política, una Religión Estatal de un antiguo Imperio, el Catolicismo. Ellos, los rosacruces, entendían que no se puede reformar el estiércol, sino que se debía derribar las columnas que sustentaba el Gran Remedo, la Mentira, y reconstruir desde casi cero, recopilando de diferentes sitios y lugares, la sabiduría oculta y olvidada.


No se podía reconstruir la construcción del Cristianismo original con los cuatro ladrillos degradados de la Religión que se pretendía reformar. La idea era acudir a las fuentes, a sus orígenes y de ahí el simbólico viaje de Rosentkreutz por las tierras de Oriente Medio que, curiosamente, no incluía la conocida como Tierra Santa. Y esto es así, porque la Rosacruz buscaba las fuentes del cristianismo en otros lugares, como el Egipto medieval, no el de los faraones, Damcar, ciudad imaginaria que bien podría indicar las tierra de Siria, Persia o la antigua Sumeria.


La Rosacruz en Europa es el símbolo del retorno de la antigua cultura de la Filosofía Griega a un continente sumido en el más inquietante y terrorífico oscurantismo propiciado por una nefasta Religión de Estado y que estaba afincada en la Ciudad de Roma. El Movimiento Rosacruz supuso un nuevo iluminismo en Europa, que se había alimentado de la época renacentista, tras el regreso de los cruzados a Europa tras perder Tierra Santa, y que se completaría en el Siglo XVIII, con el entronamiento de la Razón y el exorcismo de la superstición.  


La Rosacruz representa el regreso de la Sabiduría Antigua, la Gnósis, el Conocimiento de la Verdad a Occidente y esa Verdad era Chrística; estaba contenida en el verdadero cristianismo original de Apolonio de Tiana, quien fuera suplantado por un personaje ficticio procedente de Judea, Jesús de Nazaret. Una Filosofía que se afincó en muchos lugares de Oriente Medio; pero que destacó en la Ciudad de Alejandría con los movimientos neoplatónicos y neo pitagóricos.


Los rosacruces intuyeron que el verdadero Cristianismo, la verdadera Gnósis, era algo que trascendía la figura de un Personaje supuestamente histórico y por lo tanto, no podía ser una institución cerrada y enlatada como sucedió con la iglesias supuestamente reformistas; sino que supo, desde el principio, que debía de abrir puertas y ventanas esperando nuevos hallazgos del Pasado y que proveyeran de nueva Luz a la Reforma Integral que, desde luego, aún, al día presente, no ha concluido.


No, la Rosacruz no podemos ni debemos amoldarla a nuestro gusto y capricho. La Rosacruz es la Verdad incontenible del Conocimiento de Chístos, el Alma Humana eterna e inmortal, la verdad sobre el verdadero origen del Mundo y de la Humanidad, así como del Destino y misión de todos nosotros.


El Origen de la Rosacruz, como conocimiento gnóstico, se puede vislumbrar en la antigua Mesopotamia, Tartesia, la Atlántida y por supuesto Egipto y después Grecia.


Aralba Pensator Minister, Frater RC