martes, 2 de noviembre de 2021

Lección 93, Séptimo Grado, Segunda Orden

 Séptimo Grado, Segunda Orden "Adepto Liberado":

"El lucrativo Negocio de la Mentira"


-O de cómo algo falso, repetido hasta la saciedad, termina para la Historia, siendo verdad-


¿Como es posible, que un enamorado de la Historia, esté desencantado con ella? Es muy manida la leyenda que dice "los vencedores escriben la Historia"; pero también, con el paso del tiempo, los descendientes de los perdedores suelen revisitar la Historia, falseándola y vasculándola en sentido contrario. Esto produce una enorme confusión y que tras publicaciones y refritos de publicaciones, la verdad se haya convertido en algo opaco y muy difícil de descifrar.


Los vencedores militares crean la Historia, los perdedores militares terminan modificando, o dando una versión radicalmente distinta de dicha Historia; pero, además, para liar más la Historia, tanto las religiones como otra organizaciones fraternales y esotéricas, con el fin de crearse una heredad histórica antigua, crean una historia mitológica y legendaria imposible de poder demostrar, aunque esté fundada en hechos realmente ocurridos. Es lo que se viene a denominar como verdades a medias, ergo mentiras.


Cada día que pasa, tras nuestra investigación y reflexión, estamos más convencidos de que el Cristianismo moderno es una invención tardía de, alrededor del Siglo IV, según nuestra Cronología impuesta. Dicho lo cual, si el invento de la Historia antigua comienza en dicho Siglo, lo propio es que el Siglo I, debería de haber sido a partir de la reinvención de la Historia y no cuatro siglos antes. Esto está realizado para darle a la Iglesia Cristiana un valor histórico que no tiene, en lugar de que se vea cómo lo que es, una invención de la época de Constantino.


¿Por qué se realizó tan salvaje manipulación? ¡Para darle una validez histórica anterior a la Fuente Gnóstica de donde procede el Cristianismo! y así, convertir por obra de "birlibirloque", la Historia inventada en algo anterior a unas supuestas herejías posteriores y que no fueron tales.


Dicho lo cual, la Historia Oficial de la Iglesia nos dice que los cristianismos gnósticos fueron herejías de los siglos II y III, posteriores a la leyenda de que Pedro, como Piedra angular, creara la Iglesia de Cristo. Nuestra revisión de la Historia nos indica que el verdadero Cristianismo Gnóstico se origina, en tanto que varias sectas gnósticas, en los tres primeros siglos de nuestra Era y que no es hasta el Siglo IV que el Imperio reinventa la Historia para darle a su nueva Religión Oficial, una antigüedad falsa.


Los revisitadores posteriores, intentando desequilibrar la balanza a su favor, siglos después, durante la caída de la Orden del Temple y las masacres de los valdenses en Occitania, basándose en los manipulados informes de la Inquisición, que trataba de convertir a cristianos fieles en herejes satánicos, convierten, de forma ficticia, a parte de esos mártires cristianos en mártires de una Herejía que nunca, escuchadme bien, nunca existió. Aquella cruzada de cristianos contra cristianos, escuchadme bien, fue por motivos geopolíticos y financieros. La supuesta herejía solo fue una excusa, hoy hablaríamos de "falsa bandera", para realizar una invasión y anexionar territorios y bienes, cuyos legítimos propietarios fueron ejecutados como herejes en las hogueras, tras falsos juicios y confesiones forzadas mediante la tortura. En esa Cruzada geográficamente localizada, debemos de incluir la destrucción de la Orden de los Pobres Caballeros de Cristo; los cuales fueron despojados de sus bienes e incorporados, por un lado, a la Corona Francesa, y por otro a otras órdenes monásticas.


Pero mira por donde que, basándose exclusivamente en los informes inquisitoriales, siglos después los estudiosos esoteristas crearon una nueva Historia que fue alineándose con nuevas leyendas, hasta conformar una inmensa biblioteca de libros que, en realidad, no poseen una base histórica; pero que han sido muy apropiados para alimentar la fantasía popular y darle un origen antiguo, a organizaciones que no la tienen, como son el caso de la Masonería o de las múltiples


sectas rosicrucianas.


Basándose en esas verdades a medias históricas; es decir, mentiras como la copa de un pino, es que hoy existes múltiples organizaciones neo templarios, rosacruces que enlazan su Historia con esos cátaros inexistentes e, incluso, dar un origen cátaro a personajes históricos de relevancia como Leonardo D' Vinci, e incluso alguna Organización neo cátara con sede en la Cataluña española.


Hace ya ciertos años que trabajos de historiadores nos pusieron en la pista de la posible falsedad de la Historia Cátara. Ya sabéis, una mentira lleva a otra y cuándo una Historia está cargada de ellas; en primer lugar, no es fiable y, en segundo lugar, existe mucha posibilidad de que sea falsa de solemnidad al tratarse de una invención interesada.


Según esos estudios, de los que hablamos, la inmensa matanza de la que se habla no se corresponde con las cifras reales; es decir que, sin negar las atrocidades de los cruzados, las cifras de ejecutados en las hogueras estàn terriblemente infladas. Son una exageración. Se cuentan matanzas de miles de cátaros dentro de ciertas iglesias. Iglesias que, por otro lado, no podían contener, apretujados, a poco más que unos cientos de personas. Se habla del último baluarte en el Castillo de Montsegur, cuando dicha fortaleza fue creada mucho tiempo después de las masacres. También se habla, falsamente, de que la masacre estuvo compuesta por Valdenses y "Cátaros", cuando de los valdenses tenemos miles de documentos históricos que los historiadores serios pueden visitar y, sin embargo, de los cátaros solo existen pequeños vestigios con los que solo se podría escribir un libro de unas veinte páginas.


"No oiga, señor, de los cátaros existe una ingente información", me dirán y yo les contesto que toda esa información existente es realmente valdense; en muchos casos manipulada, con posterioridad, en siglos recientes para dar un cuerpo existencial a una herejía maniquea que jamás existió en Occitania, Albi y el Languedoc. Los albigenses no fueron otros que los Valdenses de la Ciudad de Albi. Los Buenos Hombres eran los Pobres Valdenses. Los falsos historiadores del Siglo XVIII y del XIX, tomaron la Historia real de los valdenses y la mezclaron con los informes inventados por la Inquisición. De esa mescolanza surgió la leyenda cátara y ahora resulta que solo se habla de Cátaros y Albigenses y solo se dedican unas pocas líneas a los valdenses masacrados.


Una prueba fundamental de lo que estamos diciendo es que la Iglesia y el Papa Francisco, muy recientemente, han pedido perdón por las atrocidades ejecutadas contra los valdenses; pero nada dijeron de los cátaros albigenses y no es porque los cátaros fuesen adoradores del Diablo, sino porque en la Historia del Vaticano, no entra una Organización, como los cátaros, que nunca existió; pero sí la de los Valdenses sobre quienes se construyó una serie de falsas acusaciones heréticas con el fin de hacer aceptable, para la ciudadanía, su aniquilación y castigo.


Los Valdenses eran Cristianos Antiguos que no aceptaban la mayor parte de las doctrinas y Dogmas de Roma, tampoco la mayor parte de los sacramentos. Los únicos sacramentos que mantenían era el bautismo de los adultos, a modo de testimonio público, por inmersión y la comunión como un recordatorio de la muerte de de Cristo, según se menciona en los evangelios; es decir, incluyendo el matrimonio e incluso la Imposición de manos como transmisión sacerdotal, solo eran entendidos como símbolos para recordar verdades trascendentes, nunca como sacramentos, tal y como los entiende la Iglesia Católico.


Puede decirse que la originaria Iglesia valdense, muy anterior a la Reforma Protestante, era un resquicio de los cristianos gnósticos de lis tres primeros siglos del Cristianismo. Es evidente que, como tales, no podía aprobar la supuesta transustanciación de la Hostia consagrada, tampoco creían en la virginidad de María, cosa razonable y natura, ni mucho menos en la intersección de María o los santos.


Todo ello era suficiente excusa, para la Iglesia de Roma, como para que se permitiese una terrible Cruzada contra esos denominados herejes; no siendo suficiente para agrandar el pecado valdense, la Inquisición creó más pecados y herejías que solo pueden encontrarse en los falsificados informes de la Iglesia.


Sé que es extremadamente difícil de sacar la Verdad dentro de una enquistada mentira que se ha venido transmitiendo por fantasiosos es rotores cuyo único deseo era conseguir que lo que nunca existió cobrará realidad. En el fondo, incluso la Iglesia podría estar interesada en la existencia de la falsa herejía Cátara, así la catástrofe valdense podría minorizarse, haciendo que las mayores atrocidades fuesen dirigidas hacia algo que jamás existió.


Con el paso del tiempo, del mismo modo que la mentira cátara se ha consolidado como una verdad casi absoluta, las mentiras y exageraciones acerca de la Segunda Guerra Mundial, serán tomadas como una Guerra del Bien contra el Mal, como si en cualquier contienda existiesen buenos y malos y unos crímenes fuese excusados mientras los del otro bando no.


Definitivamente, la Historia que nos cuentan no es fiable, ni ahora ni nunca. Recuerden la falsa bandera de la Pandemia, que no se niega, como excusa para un presente Reseteo del Capitalismo. Lo que antes sucedió se vuelve a repetir, porque la Historia que nos han contado es mitad verdadera y mitad mentira.


La Verdad nos hará libres.


Aralba Pensator Minister, Frater R+C