miércoles, 3 de noviembre de 2021

Lección 119, Séptimo Grado, Segunda Orden

 "El error conceptual de asignar maldad a los naturales depredadores o  Servicio de Limpieza, de la Naturaleza"


Una máxima gnósticas dice que cualquier historia creada para aterrorizar es falsa de necesidad.


El error de quienes convierten a los arcontes en seres malignos como Carlos Castaneda o a los aliens en demonios malignos, como Salvador Freixedo o Andreas Caber Kaiser, consiste en dibujar a unas fuerzas automáticas de la Naturaleza sin vida propia o consciencia individual, como son los arcontes, en seres conscientemente perversos. Se encuentran, ambos, co.o muchos otros, profundamente equivocados y transmiten su equivocación, de forma aritmética, provocando miedo y paralizando a sus oyentes o seguidores, haciendo que nuestra energía desprendida, ante el acto natural y no dañino, para el Alma, de la depredación, en lugar de positiva sea negativa, provocando en los arcontes efectos negativos al alimentarse y que realimenta nuestros miedos y bajas pasiones..


Somos los humanos, con toda nuestra capacidad creadora, quienes imaginamos el Mal de seres supuestamente conscientes y depredadores, construyendo imágenes arquetípicas falsas; pero que terminan provocando los Efe tos negativos que imaginamos. El Mal sólo posee existencia dentro de nuestra Mente y es producto del miedo ignorante confabulado con la imaginación activa..


Los arcontes tienen que cargarse de energía y la toman, naturalmente, de los seres que pueden proporcionársela en mayor cantidad y mejor calidad, nosotros. Es nuestra ignorancia y miedo por aquello que no comprendemos, al haberlo olvidado, lo que hace que sintamos terror por las entidades que forman parte de las propias leyes del Universo; dado que ese miedo es infundado al ser la energía de nuestras almas ilimitada. La energía de un solo Ser Humano, podría alimentar a todos los arcontes existentes por tiempo ilimitado; pero es el miedo a aquello desconocido, por olvidado. Miedo a perder nuestras vida y, equivocadamente, nuestras almas, lo que hace que entremos en pánico y nos paralicemos dejando abierta la válvula de salida de energía como si dejáramos un grifo de agua abierto. 


Ese miedo, ese terror, produce un efecto bola de nieve, multiplicador, y como la pescadilla que se muerde la cola permite que desprendamos cantidades inmensas de energía, sin ton ni son, de forma caótica, que atraen, a modo de toque militar de fagina, a los arcontes a su abrevadero; eso provoca más miedo y, por consiguiente, se desprende más energía y así sucesivamente, creando miedo, terror y pánico, cuya vibración atrae a más elementos al banquete.


Por consiguiente, la Mente de los o odiados debe de encontrarse, en todo instante, en calma y sin in.utarse ante las adversidades de la Vida. Sólo el desapego hacia la materialidad, el conocimiento de nuestra auténtica inmortalidad y de que, bajo ningún concepto, podemos ser dañados, hace que nuestra Energía desprendida no se torne negativa y que los arcontes que se alimenten de ella, no desprenda, como Producto de desecho, efectos negativos y perjudiciales.


Aralba Pensator Minister, Frater R+C.