Séptimo Grado, Segunda Orden "Adepto Liberado":
"El Rosacruz, un Peregrino en Tierra Extraña"
-Dad a Dios lo que es de Dios y al Cesar lo que es del Cesar-
Los estudiantes rosacruces, a medida que van tomando consciencia de lo que en realidad el Mundo es, y del porqué ellos están en él, se sienten como apátridas de su verdadero hogar, inmigrantes inconscientes aquí o viajeros peregrinos, sintiendo, dentro de sus almas, una sutil melancolía producto de la nostalgia de su Patria Original, de origen Celeste, abandonada y perdida.
Una pregunta que se realizan los estudiantes, llegado ese estadio, de sensación y entendimiento, es ¿Debo de seguir implicándome en los asuntos de éste Mundo, o debo de mantenerme al margen? No seremos nosotros quiénes nos entrometamos en la vida de nadie, cuando nuestra prédica principal es que cada uno debe de obedecer a su Ser Interno, mediante los mensajes que recibe de su intuición.
No obstante, dicho lo anterior, sí que vamos a hacer una breve puntualización. Los Ciudadanos de Shambala, eso son los estudiantes conscientes de la Rosacruz, están eximidos de rendir pleitesía a cualquier dirigente de éste Mundo, dado que su Consciencia vibra a un nivel muy superior al que usan los regidores de éste Mundo. Entonces, es una visión errónea considerar a los que dirigen el Mundo como Personas que pueden dirigir nuestras vidas. Para poner un ejemplo es como si el Director Gerente de una Empresa solicitará permiso al bedel para salir a la calle y realizar algún recado. Sería algo incoherente y no entra en la cabeza de alguien con dos dedos de frente. El dirigente más importante del Mundo no le llega a la suela de los zapatos de su Maestro Interior.
Un Estudiante Rosacruz, entonces, ¿Debe de, acaso, mantenerse al margen de lo que acontece en el Mundo?, ¡No!, en modo alguno; pero sí es importante el no involucrarse, de forma activa, en los asuntos mundanos, en tanto que nos quitaría tiempo de nuestro verdadero objetivo y que no es, téngalo en cuenta, mejorar éste Mundo. Eso deberíamos de dejarlo a otros. Eso sí, un Estudiante Rosacruz avanzado, debe de ir dejando, a su paso, una impronta de benevolencia y buen hacer en lo moral y en el ejemplo de una honesta espiritualidad.
Aunque éste Mundo deba de, algún día ser destruido, los estudiantes rosacruces estamos obligados a convertirlo, mientras tanto, en un lugar mejor de convivencia si permanecemos en él. Eso se realiza, fundamentalmente, mediante el ejemplo de nuestras acciones en nuestro Círculo de convivencia más cercano. No es cuestión de que vayamos predicando, a los cuatro vientos, que somos rosacruces. No se trata de eso; pero sí de que marquemos la diferencia, respecto a los demás, en todas las facetas de nuestras vidas; es decir que nos convirtamos en las mejores personas posibles; pero, repetimos, sin perder el norte de nuestro verdadero objetivo y que consiste en convertirnos en adeptos rosacruces. La Magia del adeptado ha transformado nuestras vidas y ha hecho que recordáramos nuestra memoria ancestral; pero también nos permite realizar milagros allá por donde vayamos caminando.
Usted puede perder su tiempo con la política, trabajando desinteresadamente para una ONG, como la Cruz Roja, o para una Orden Fraternal del estilo de los Rotarios. Nadie se lo va a recriminar se lo aseguro y yo menos que nadie; pero insisto en que esos trabajos para la Comunidad, para los estudiantes rosacruces, no deben de ser su objetivo vivencial principal. Está bien que podamos influir, mediante el ejemplo, en aquellos que llevan las riendas del Mundo; pero no queramos ser nosotros quiénes llevemos esa carga, porque es incompatible con nuestro peregrinaje Rosacruz. Si nos anclamos en un Lugar determinado, no podremos estar en aquellos otros donde realmente se nos necesite y, así, siempre existirá una terrible lucha interior entre lo que deberíamos de hacer y entre lo que realmente estamos haciendo.
La Política Humana debe de estar superada para los estudiantes rosacruces porque es como si se volviera al parvularios después de haberse doctorado en alguna Universidad. No tiene sentido. La Luz que llevamos con nosotros no es una Luz de éste Mundo para alumbrar los caminos de éste; sino que, por el contrario, es una Luz Celestial que llama a abandonar éste Mundo y comenzar un nuevo camino que nod lleve fuera de aquel.
Sea como fuere, hagas lo que hagas estará bien, pues nada de lo que hagas o dejes de hacer estará fuera de las páginas de Libro de Viaje que tú mismo escribiste antes de montar en éste Barco. Tú decidiste tu Vida, lo que harías con ella y cómo te comportarías. Mi misión consiste, tan solo, en recordar que uno es el Mundo del Cesar y otro tu Mundo Celeste, con el que estás comprometido. No cargues tu mochila con cosas pesadas de éste Mundo, no vaya a ser que sea tanto tu apego, tras tu peregrinaje en este Sitio, que te impida regresar a tu verdadero Hogar.
Aralba Pensator Minister, Frater R+C