Séptimo Grado, Segunda Orden "Adepto Liberado":
"Gnósis y Extraterrestres"
Algunas de las religiones monoteístas mesiánicas, si se divulgará la real existencia de razas extraterrestres inteligentes se encontrarían en un grave aprieto a la hora de intentar explicar la misión de sus Mesías, de cara a otros seres conscientes de fuera de nuestro Planeta; o ¿acaso, hubo un Mesías que se sacrificara por la salvación cada uno de ellos?
La Gnósis es vista por todas las religiones mesiánicas como la peor y más peligrosa herejía a combatir. Por ello quemaron vivo, por ejemplo, Giordano Bruno; quien en época tan terrible como el oscurantismo medieval se atrevió a dictaminar que la Tierra no era el único mundo habitado; sino que, por el contrario, existían muchos mundos habitados por seres inteligentes similares o muy diferentes a los seres humanos.
La Gnósis, a pesar de conocer dicho hecho, el de la diversidad de la vida extraterrestre, jamás se ha significado en dicho sentido; pero tampoco en el contrario. Ese conocimiento, no obstante, está implícito a la propia noción de la Gnósis.
La Gnósis, no dice que los seres humanos sean una Especie elegida, ni que una determinada raza sea elegida para honrar la gloria de alguna divinidad. La Gnósis siempre ha dicho que el Cosmos, los universos, son una gigantesca mente y que todo lo que existe, se mueve o vive en ellos, está vivo y posee mente. La Gnósis, como Conocimiento proveniente del Pleroma, el Conjunto infinito de los subconjuntos universales, permea a todos ellos y llega hasta los más intrincados rincones de lo existente.
Cuando la Gnósis nos habla del principio Chrístico, no se refiere a una personalidad concreta de algún planeta o región del Universo determinada, sino a la chispa de espíritu que está contenida en todas las partículas del Universo, ya sean inorgánicas, orgánicas o conscientes; Es decir, la Gnósis trasciende cualquier concepto religioso y posee una influencia multiversal.
¿Qué nos dice la Gnósis respecto a éste asunto? Que todo el Universo, o multiverso, es como un inmenso escenario múltiple, donde rigen las mismas normas y leyes y donde se está interpretando una cósmica función teatral. Por supuesto, todas las razas y especies consciente, sean del planeta que sean, poseen un mismo Destino: Despertar, parar la rueda de la Vida y regenerar al Demiurgo, cuyos átomos conforman todo lo que existe, para retornar, todos juntos, como un solo Ser al Hogar Celestial y que se encuentra en el seno de los eones del Pleroma.
No, según la Gnósis, los seres humanos no somos la cúspide de nada. Somos unos seres conscientes más y, en muchos casos, menos que algunos de nuestros hermanos del Espacio. Además reconoce la importancia del Alma de los animales, del Reino vegetal, del Reino Mineral y de otros reinos de existencia que no nos son tan evidentes como el Plasma, los gases o el mismo fuego.
Todas y cada una de las religiones constituidas en torno a determinadas razas extraterrestres y, o federaciones galácticas, son tan falsas como las religiones o teosofías de las que proceden. Los extraterrestres no son ni ángeles ni demonios, esa prerrogativa tenemos que dársela a los arcontes o fuerzas de la Naturaleza. Las razas inteligentes del Cosmos, incluidas las que nos visitan desde hace miles de años, no son otra cosa que nuestros hermanos más avanzados que nosotros, ya sea en lo espiritual o en lo tecnológico. Por lo tanto, no deben de ser adorados como dioses, aunque su inteligencia, respecto de la nuestra, sea tan diferente como la nuestra respecto a la del mundo de los insectos.
Por lo tanto, y partiendo de la Idea Gnóstica de que todo lo imaginable es posible, dado que ya existe en el Pleroma o Mundo de las Ideas, es fácil de entender no solo que haya otros mundos habitados por razas inteligentes; sino que también, unas pocas, nos visitan con regularidad desde hace miles de años y que, algunas de ellas, conviven con nosotros sin que nos hayamos dado cuenta.
Esto es algo que en poco tiempo será dado a conocer por algunos de los gobiernos de la Tierra y que, desde hace décadas, no solo conocen de su existencia sino que vienen manteniendo relaciones formales.
Según la Gnósis, todos los seres del Multiverso somos obreros de la Consciencia y de la Vida y, del mismo modo que nuestra actitud hacia otros seres vivos ha servido para su propia evolución, así otros hermanos mucho más antiguos y avanzados que nosotros, nos han venido ayudando, por miles o cientos de miles de años, en nuestra propia evolución de la Consciencia y eso, repetimos, no los convierte ni en divinidades ni en entidades angélicas; mucho menos en nuestros arquitectos o creadores, dado que cada Chispa Espiritual es autosuficiente y ha surgido del Éter por voluntad propia.
Todo Ser consciente es un Ser con sentimiento de Libertad y, por lo tanto, no puede ni debe de aceptar la esclavitud bajo la bota de seres mucho más avanzados que él. Por lo tanto, respetando la superioridad o inferioridad de cualquier Raza o Especie, está terminantemente prohibido, según la Gnósis, construir un andamiaje religioso al rededor de nuestros hermanos mayores del Cosmos ni, aceptar algún tipo de vasallaje inter especies.
Aralba Pensator Minister, Frater R+C