Páginas

miércoles, 27 de octubre de 2021

Lección 36, Séptimo Grado, Segunda Orden

 Séptimo Grado, Segunda Orden "Adepto Liberado":

"Gnosticismo"


Gnósticismo es sinónimo de herejía y librepensamiento. De Conocimiento y de Verdad. De Deismo antropocentrista y de antidogmatismo.


Para el Gnosticismo no es importante ni la Historia ni la Literatura. Ambas disciplinas son externas, lineales y sujetas a la manipulación interesada. A la gnósis le interesa la Filosofía y el Pensamiento.


La gnósis es tan antigua como la propia Consciencia del Ser Humano. En cuanto el primer Humano tuvo conocimiento de sí mismo y de su entorno, comenzó la gnósis a pasearse por el Mundo.


Toda Filosofía, Ideología o Religión posee un origen gnóstico; independientemente de que, a posteriori, el Poder las haya manipulado en beneficio propio.


Para la Gnósis no es importante si un personaje u otro existieron en realidad. Lo importante es la Enseñanza, el Conocimiento, el Mensaje; por lo tanto, los gnósticos no contemplan los libros sagrados como si de relatos históricos se tratase. Para la Gnósis, esto es irrelevante.


Antes de cualquier religión fue la Gnósis y la Gnósis es el origen del Pensamiento Divino. 


La Gnósis dice que nada es mortal, todo es eterno aunque en transmutación constante.


La Gnósis dice que todos llevamos, en nuestros genes, una semilla divina, una flama que nos convierte en parte de, y uno con la Divinidad.


La Gnósis dice que aquello que se conoce como Dios o mil maneras diferentes, no es otra cosa que la Esencia de todo; una Fuerza Mental Universal de carácter creador.


La Gnósis dice que la Consciencia; es decir, nosotros, nos encontramos en esta Prisión de Materia por un error, un accidente cósmico. No estamos aquí porque nuestra naturaleza sea maligna o exista un Pecado Original; de hecho, tal Pecado Original no es otra cosa que el accidente cósmico del que la Gnósis habla.


La Gnósis dice que el Mundo visible, nuestro Universo, es prescindible e irrelevante. No debe de existir agobio alguno por el posible futuro de nuestro Planeta o de nuestra Especie. Mientras siga existiendo éste Plano de existencia, seguiremos estando encarcelados tras los barrotes de la Materia.


Christos, Cristo, es la Fuerza Cósmica Universal que mora en todos y cada uno de nosotros. Es la flama o semilla de la que habla la Gnósis. Cristo mora en el interior de todas las criaturas existentes; pero en algunas, la consciencia no lo reconoce y en otras, por el contrario sí. Esto solo depende del Estado de somnolencia del Ser.


La Gnósis nos comunica que, a pesar de ésta nuestra Prisión Temporal, no estamos solos, pues la Gnósis, la esencia de Christos está, como una esencia estética, en todas partes. La Gnósis no solo mora en la información de nuestro ADN, sino también en todas y cada una de las partículas que conforman el mal llamado vacío cuántico; pero mucho más importante es conocer que la Gnósis, a modo de refresco, nos es bombardeada desde fuera de la Prisión, el Mundo Original.


La Gnósis nos dice que existe un trasiego de información de nuestro Plano hacia el Hogar Celeste, a modo de plegaria y otro inverso, de ése Mundo de las Ideas hacia ésta Prisión y que ese feedback se conoce como Metanoia. La Metanoia viaja por el Éter del Cosmos, y lleva, en su seno, información entrelaza, la Gnósis; es decir, la Metanoia es una Onda Portadora encargada de transmitir la Gnósis, el Pensamiento de Dios, el Pleroma.


La mayoría confunde la Gnósis con el Maniqueísmo, una de sus manifestaciones históricas de carácter religioso; pero son cosas distintas. El Maniqueísmo es gnósis enlatada como cualesquiera de las otras religiones. La Gnósis no es enlatable para ofrecerla al consumo de otros. La Gnósis es la Libertad personificada que no admite doctrina ni dogmas. El Maniqueísmo es dualista, la Gnósis, a pesar de las mentiras que te han contado, no lo es. No lo es porque la Gnósis conlleva un principio único Creador al que se conoce como el Todo y del que cada cosa, cada partícula que lo confirma es consustancial y no externizable o desechable.


Otra cosa es que para la manifestación del Universo, de la Vida y de la Consciencia Espacio Temporal, sea necesaria la Dualidad, lo positivo y lo negativo que permiten la necesaria diferencia de potencial que permita la acción, el movimiento, la Vida en sí.


La Gnósis, a pesar de los mentirosos compulsivos, no dice que haya una lucha entre las fuerzas del bien y del mal por ver cuál de ellas prevalecerá. La Gnósis nos dice que existen dos fuerzas contrapuestas, de diferente polaridad, que luchan entre sí por mantener el equilibrio que permite la existencia. Sí ese equilibrio se rompiese, ambas fuerzas desaparecerían y el Mundo Espacio Temporal se desintegraría.


Para la Gnósis, el único mal existente es el estar atrapados en la Prisión del Mundo y el objetivo principal de la Consciencia, es despertar a ese hecho. Qué tanto el Mundo como nuestros cuerpos materiales deben de ser destruidos, eliminados, desintegrados; porque mientras esto no suceda, tampoco podremos regresar a nuestro Hogar Celeste, el Mundo de los eones, el Cuerpo de Dios,el Pleroma.


No, no sirven ni la eutanasia o el suicidio, porque el Hombre no es un Individuo sino un colectivo y la Gnósis nos dice que de aquí o salimos todos juntos o no salimos ninguno. Dicho de otro modo, aquí o se salva todo el conjunto del Universo o no se salva nadie; pero incluso eso es irrelevante, pues por muchos cientos de miles de millones de años o eones, de tiempo, que dure el Universo, siempre será un mero suspiro ante la infinitud y eternidad del verdadero Mundo del que procedemos; dicho de otro modo, la Vida es una suerte de pesadilla de la que sí o sí, en algún instante deberemos de despertar.


La Gnósis dice que el proselitismo de las ideas gnósticas es negativa o como poco intrascendente. La Gnósis no se puede imponer en modo alguno, la Gnósis se muestra con el ejemplo de Vida, con el ejemplo de acción y con el ejemplo de pensar. El Gnóstico es como una lámpara incandescente en mitad de una noche cerrada. El Gnóstico, sin buscarlo, muestra su Luz sin más; de hecho, no es otra cosa que un faro repetidor de la Gnósis inmaculada procedente del Pleroma o Cuerpo de Dios.


Christos es la Gnósis en nosotros y ese Conocimiento Divino es el único capaz de salvar al Universo,al Hombre, a la Humanidad. Por lo tanto, la Gnósis es Amor, pues Christos es Amor, el pegamento universal que impide que las cosas estén separadas.


Aralba Pensator Minister, Frater RC