domingo, 6 de enero de 2013

Porqué hacemos esto




Muchos de los que siguen nuestro Trabajo en la Red no necesitan conocer los motivos del porqué hago lo que hago, los motivos que me mueven a ello y sobre todas las cosas ¿Qué es lo que pretendo?


Me animé a comenzar mi primer Blog como consecuencia del cierre de la Web “NGC”  donde venía publicando mis trabajos literarios de ficción y que era dirigida por Pilar Barba.  Esto no fue algo automático sino que fue Carlos Postigo, un Compañero de Trabajo, quien me animó a enfrentar esta aventura tras comenzar a publicarme en su Blog "Suburbios de la Razón” que acababa de abrir.


El único ánimo que, hasta el presente, nos ha movido a incorporarnos al encriptado mundo de las redes electrónicas ha sido el interés de mostrar nuestro Trabajo literario y "filosófico” a la mayor cantidad de gente posible: Llegar hasta donde las editoriales no han querido hacerlo aunque sus motivos tendrán.


Quizá algunos piensen que tengo todo el tiempo del mundo y que soy un privilegiado al poder construir todo este enrevesado universo virtual; pero nos tememos que la cosa no es tan simple como pudiera pensarse. Es cierto que desde muy pequeño hemos tenido una cierta facilidad para encadenar palabras de la forma más entendible posible y que utilizo los blogs a su nivel más básico. No somos ningún experto en programación; pero, de algún modo, hemos cogido el suficiente tranquillo como para construir y llevar nuestras páginas, a modo de “Lego”, con el fin de conformar una intrincada Web de carácter personal pero sin algún ánimo de lucro. 


Es cierto que tenemos un poco más de tiempo que el resto de los mortales que aún poseen un puesto de trabajo en este nuestro querido País que se hace llamar España, dado que llevamos cerca de dos años y medio liquidando la Empresa en la que estuvimos trabajando durante unos veintitrés años, SEGUROS MERCURIO, S.A. y que fuera propiedad de D. Gerardo Díaz Ferrán. Al estar bajo la tutela de la Dirección General de Seguros, nuestro horario de trabajo es de ocho de la mañana a tres de la tarde. Eso nos deja el resto del día para otras cosas, esto es el producto final.

¡Deberías estar buscando trabajo! Me podríais decir alguno de vosotros; pero dada la situación del panorama laboral actual como que es harto complicado y debemos de agarrarnos, con uñas y dientes, a lo que aún poseemos, esa liquidación que suponemos está pronto abocada a su natural final; pero aunque de una forma subliminal, han dado en el clavo, las páginas de ARALBA no son otra cosa que el escaparate construido para llorarles y gritar, con desespero, ¡No sé hasta cuando podré gritarles desde este Estrado virtual; pero aquí estamos y esto soy yo, la Web de Aralba, en esencia solo soy Yo! Si alguien ha sido capaz de encontrar mi potencial, aquí me tiene. 

Saben cómo escribo, conocen como pienso y hasta tienen la posibilidad de ver mi alma desnuda y sin algún tipo de coraza, hasta les he entregado mi anti-curriculum para que vean lo que pienso, sin tapujos, de esos monstruos humanos que ven a sus hermanos de especie como simples máquinas productivas a las que hay que estrujar para sacarles el mayor valor añadido posible. 


Sinceramente pienso que este Mundo está perdiendo el potencial de un buen escritor y mejor pensador. Evidentemente hablamos de mí mismo. Ruego disculpéis la supuesta pedantería; pero si no lo hacen otros, hablar bien de mí, no me queda más remedio que hacerlo yo mismo. Quizá el Sistema aún no se encuentre preparado para recibir la Verdad en toda su crudeza y claridad. Quizá hayamos nacido antes de tiempo como tantos otros lo hicieran en el pasado o quizá seamos realmente un Pedante de proporciones cósmicas. Entra dentro de lo posible, lo puedo aceptar.


Empezamos nuestro trabajo en estas páginas incluyendo solo trabajos propios, creyendo que algunos podrían arrimarse al proyecto y colaborar mano a mano conmigo; pero lamentablemente eso no ha sido posible, a pesar de haber ofrecido esa posibilidad a mis lectores en varias ocasiones. 


Últimamente hay muchos trabajos que no son míos; pero que tampoco me han sido ofrecidos por sus autores sino que yo mismo los he arrancado de otros lugares y los he traído a este particular estrado. ¿Porque actúo de ese modo se preguntaran? La cosa es simple: Entro en Internet con la intención de encontrar fuentes de inspiración para seguir construyendo nuestro edificio gnóstico y sucede una cosa que no debería de pasar desapercibida: Hay una cantidad de escritos maravillosos que no solo no podrían ser mejorados sino que casan como un guante con lo que trato de mostraros a todos. No tiene sentido traspasarlos a mi inexistente argot. 


Es simple, corto y los traígo hasta aquí pegándolos con el mayor cariño posible y sin algún ánimo de lucro para que pueda encontrarse a nuestro alcance, al lado de sus otros hermanos, sean artículos de autoría mía o de otros y cuyos autores siempre serán nombrados, salvo cuando haya sido imposible encontrar su autoría. 


Creo que ya lo debéis de tener claro, paisanos, hermanos y amigos: Desde hace dos años, la desesperación de que mi Destino impidiera realizar el Trabajo que mi Ser Interno me indica, nos ha llevado hasta aquí: Perder la vergüenza por completo y mostrarnos como realmente somos ante vuestra crítica mirada. Nunca hemos pretendido, ahora tampoco lo hacemos, convertirnos en un escritor profesional de novelas o historietas intrascendentes que solo buscasen cubrir el ocio con interesantes y bien escritas historias. Nosotros, Yo, hemos venido con algo, del otro lado, para entregarlo a mis hermanos humanos, todos vosotros. Ciertamente otros lo hicieron antes que yo; pero os aseguro que jamás fue con tanta claridad y certeza en la exposición; y no porque uno sea mejor que ellos, sino porque soy posterior, más reciente, nada más que por eso y tengo la última posible interpretación de la gnosis y necesito de vuestra ayuda, en el modo que sea, para que este Trabajo de divulgación necesario no se pierda nunca más, como ya lo hiciera en el pasado.


De momento no necesito vuestro dinero y espero, si la Providencia así lo quiere, que nunca sea necesario; pero sí reclamo vuestro calor humano, cariño y comprensión. Para mí sería muy sencillo decir que soy el Canal de manifestación de un Sublime Ser Espiritual y del que solo soy un simple instrumento de manifestación; pero os estaría mintiendo aunque, de un modo literario, ya haya usado esa fórmula de Trabajo, en la Orden Iluminista. Es mi propio Ser interno el que desea que sepáis lo que yo mismo sé. Algo muy simple y que se puede explicar con palabras sencillas que hasta un niño pequeño podría entender, sin complicadas explicaciones cabalistas  ni engorrosas formulas astrológicas o matemáticas. La verdad es lo más sencillo del mundo y está al alcance de todos nosotros; pero es tan simple que, en la mayoría de las ocasiones nos negamos, a nosotros mismos, aceptarlo como algo Real, a pesar de encontrarse plenamente visible ante nuestra mirada.


Os aseguro que me gustaría utilizar, todo el tiempo de esta Vida, para descargar, en forma de escritos, la información que he traído conmigo a este mundo; pero tenemos que comer para vivir y luchar para poder sobrevivir, como todos vosotros, en la gran Guerra que supone la Vida en nuestro bélico Universo. Solo os ruego que comprendáis mi esfuerzo en haceros llegar lo que humildemente considero verdades gnósticas traídas del Universo Original y del que todos, sin excepción, procedemos. También es cierto que podríamos hablar más de política mundana que de cuestiones espirituales; pero quizá no sea mi cometido actual o, lo más probable, aún no haya llegado el momento, dado que es posible que sea necesaria una preparación espiritual previa e idónea antes de tratar temás más mundanos y de pura supervivencia.


Os Amo, de Corazón. Os amo a todos por igual, amigos o supuestos enemigos, hermanos y hermanas, conscientes de ello o no.


Aquí me encontraréis mientras así el Destino lo disponga. Estoy a vuestra disposición para abriros mi corazón y que podáis leer en él su divino contenido y que no es otra cosa que el reflejo del vuestro propio aunque, unos pocos, aún no lo podáis ver.

Salud en la Rosa, Paz en la Cruz.

ARALBA